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Sumapaz espera recursos para el desminado

Por: webmasterlocal
Publicado el: Agosto 2018

“Es curioso que en los anaqueles del gobierno no figura ninguna víctima. El miedo en el territorio hizo que los campesinos no se declararan como víctimas de un conflicto armado No tenemos presencia de ninguno de los actores que hacían parte del conflicto armado.”, estas fueron las palabras de Francy Liliana Murcia Díaz, alcaldesa local de Sumpaz en entrevista con EL NUEVO SIGLO.

La Mandataria local, además de que es oriunda del corregimiento de Nazaret y su familia habita en la zona, es ingeniera de sistema con especialización en redes y seguridad informática de la Universidad Católica de Colombia. Durante 11 años fue contratista de las alcaldías locales de San Cristóbal, Kennedy y Tunjuelito, donde se desempeñó como administradora de la red de voz y datos y supervisora de proyectos de tecnología. En el sector privado ha ejercido como ingeniera de apoyo y soporte al usuario. En el campo educativo fue docente de la institución para el Trabajo y Desarrollo Humano Uniapel y la Fundación Universitaria Inpahu.

Murcia Díaz es la segunda alcaldesa oriunda de la Localidad de Sumapaz, es decir que conoce a fondo la problemática y las necesidades de los campesinos. Su objetivo es la protección de la reserva hídrica más importante para Bogotá y Colombia, sostenibilidad y resguardo del ecosistema de páramo, bienestar de los habitantes de la localidad rural bajo los parámetros del Plan de Desarrollo Distrital, “Bogotá Mejor Para Todos”.

Tranquilidad

EL NUEVO SIGLO: ¿Luego de haberse superado el conflicto armado en el que se encontraba el país, los sumapeños han recobrado su confianza en la paz?

FRANCY LILIANA MURCIA DÍAZ: La confianza de la que hablan nuestros campesinos es la tranquilidad y la seguridad que le brinda una localidad libre de conflicto. A partir de los acuerdos de La Habana, la localidad se hizo mucho más segura. Ya no tenemos presencia de ninguno de los actores que hacían parte del conflicto armado.

Aquí hace presencia el Ejército colombiano que acompaña a nuestros campesinos en asuntos ambientales, por eso nuestros campesino se sienten tranquilos en nuestro territorio. Aquí ya no existe el miedo, ni el temor de otrora.

ENS: ¿En este proceso ha estado presente el Gobierno distrital?

FLMD: Claro que sí. No hace mucho tiempo que el Gobierno nacional y distrital estuvo aquí en el territorio. Ese día se dio inicio al proceso de desminado.

En la actualidad tenemos dos operadores trabajando en esa dirección. Ya se dividió en cuatro zonas el territorio, y hay avances significativos especialmente en la cuenca del rio Sumapaz. Estos eran lugares transitados que no se habían demarcado y desde luego ponían en riesgo no solo la vida del hombre, sino también la de los animales.

Ahora, con ayuda de los campesinos y de los mismos actores que en su momento participaron en el conflicto, se han demarcado y se evita que la gente se adentre a esos lugares que generaban riesgo para sus vidas.

Recursos

ENS: ¿Existen recursos para continuar con ese procesos?

FLMD: La primera parte del proceso ya se adelantó y consistía en la identificación y demarcación de los sectores minados. Este ejercicio ya se hizo, lo que estamos esperando es que el Gobierno nacional destine los recursos para comenzar el desminado.

ENS: ¿Y hay adelantos en la consecución de esos recursos?

FLMD: En este aspecto, el Gobierno nacional va a tener que hacer un gran esfuerzo y tiene que reconocer que en Sumapaz hay víctimas del conflicto armado. Si esa aceptación se hace, se podrán destinar dineros para el resto del proceso.

Aquí hubo una época de miedos en el territorio que hizo que los campesinos no se declararan como víctimas de un conflicto armado.

En Sumapaz habitaron todos los actores de una guerra y lo curioso es que en los anaqueles del gobierno no figura ninguna víctima, porque nuestras mesas locales que estaban trabajando en ese sentido lo hicieron a destiempo.

De manera que si no tenemos ese reconocimiento, el dinero que se debería emplear para atender estos quehaceres nunca llegará.

Cierto es que la administración del alcalde Enrique Peñalosa ha hecho esfuerzos considerables en tal sentido. Cierto también es que se hace necesario la presencia del Gobierno nacional, comenzado por un reconocimiento de una realidad. Sumapaz estuvo inmersa en hechos violentos por décadas y mal podría decirse que aquí no hay víctimas de un conflicto.